Lula propuso que los países desarrollados introduzcan un impuesto a las ventas de armas, sobre el transporte aéreo y marítimo internacional y sobre los movimientos financieros denominados "paraísos fiscales", cuyos fondos serían destinados a la aplicación de programas para reducir la pobreza.

 

20/09/2004
Pobreza-Alimentación
El hambre en su cumbre

"Lo más escandaloso no es que exista el hambre, sino que persista, cuando tenemos los medios para eliminarla", señala un documento dado a conocer el lunes 20 en Nueva York durante una cumbre sobre los medios para combatir el hambre y la pobreza en el mundo. La misma está liderada por los presidentes de Brasil, Francia, Chile y España.

El lunes 20, con la llegada a Nueva York de más de 90 jefes de Estado y gobierno para la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente brasileño, Luiz Inácio "Lula" da silva, organizó una cumbre de líderes mundiales con el fin de discutir las distintas formas para reducir a la mitad el hambre y la pobreza en el mundo para el año 2015.

En el mundo, más de mil millones de personas viven en la extrema pobreza con menos de un dólar diario, mientras que una cifra cercana a los 840 millones padece hambre y desnutrición. Un documento dado a conocer por los participantes de la cumbre afirma que "hay suficientes conocimientos y recursos en el mundo para liberarnos del hambre y la pobreza, y para promover el desarrollo sostenible y la justicia social. "Lo más escandaloso no es que exista el hambre, sino que persista, cuando tenemos los medios para eliminarla", dice el documento.

Por otro lado, cada año millones de niños mueren por falta de cuidados sanitarios adecuados, acceso al agua potable, una vivienda digna y una alimentación adecuada, a lo que se agrega que cerca de 20 mil personas mueren a diario por hambruna. A su vez, la declaración agrega que "en la etapa actual de avance tecnológico y producción agrícola mundial, la persistencia de esta situación es económicamente irracional, políticamente inaceptable y moralmente vergonzosa".

La propuesta de Lula recibió el respaldo del secretario general de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, y de los presidentes de Francia, Jacques Chirac; Chile, Ricardo Lagos, y del jefe de gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, quienes participan de la cumbre junto a representante de unos 50 países. El objetivo es que durante la cumbre se apruebe una declaración internacional en la que dichos líderes se comprometan a instrumentar medidas innovadoras para luchar contra el hambre y la pobreza.

Lula propuso que los países desarrollados introduzcan un impuesto a las ventas de armas, al transporte aéreo y marítimo internacional y sobre los movimientos financieros denominados "paraísos fiscales", cuyos fondos serían destinados a la aplicación de programas para reducir la pobreza.

Por otra parte, se exhortará a que los países ricos busquen reducir el costo de las remesas a los países en desarrollo. En realidad, la propuesta proviene de un economista francés, Jean Pierre Landau, al cual Chirac encomendó analizar formas de financiamiento para luchar contra el hambre y la pobreza, luego de un encuentro en enero de este año con Lula, Annan y Lagos en Ginebra. Rodríguez Zapatero se unió al grupo en marzo.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que actualmente hay en el mundo alrededor de 840 millones de personas que padecen desnutrición crónica. En la Asamblea General de ONU de 2000, los líderes mundiales se comprometieron a reducir para 2015 a la mitad la cantidad de personas que sufren hambre y la población con ingresos inferiores a un dólar diario. En cambio, de continuar la tendencia actual, esos objetivos se alcanzarían recién en 2147.




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